El Spitz alemán, también conocido como Spitz lobo, es un perro pequeño de Alemania. Puede medir de 23 a 28 centímetros a la cruz cuando es adulto y puede pesar de 2 a 6 kilogramos.
Es un perro que atrae a muchos aficionados por sus numerosas ventajas estéticas y de comportamiento. El Spitz alemán se caracteriza por su abundante manto de pelo fino y rígido y una abundante y sedosa capa interna.
Los ojos del Spitz Alemán son muy expresivos, con vivacidad, inteligencia y gran jovialidad, lo que hace que el perro sea muy agradable para las familias, especialmente con su carácter noble, gentil, afectuoso, juguetón y fiel. Para proteger a su perro y controlar mejor sus gastos, es aconsejable contratar un seguro médico para perros.
Problemas de salud comunes del Spitz alemán
El Spitz alemán es un perro pequeño, tiene una apariencia enfermiza y frágil, pero esta apariencia es engañosa, porque este Spitz es bastante robusto, duradero y resistente a la intemperie y a las enfermedades.
No hay ninguna enfermedad particular a la que el Spitz alemán esté predispuesto, pero puede verse afectado por ciertas enfermedades como las de la piel y las articulares en su columna vertebral.
Reembolso de los gastos de cuidado de su Spitz alemán
El Spitz alemán, como todos los perros de compañía, necesita muchos cuidados y protección por parte de sus dueños.
Para evitar malos golpes, accidentes y enfermedades que puedan afectar a la salud del perro y provocar gastos imprevistos, es posible contratar un seguro médico para el Spitz alemán que cubra todos los gastos médicos.
El seguro médico para esta raza de perro es bastante asequible, ya que cuesta entre 16 y 26 euros al mes.