Prolapso de la glándula lagrimal en perros

Los perros, a diferencia de los humanos, tienen un tercer párpado, también llamado membrana nictitante. Se encuentra a nivel del ángulo interno del ojo y está formado por un cartílago en forma de T y una glándula lagrimal. Su función es proteger el ojo, producir lágrimas y distribuirlas por la superficie del ojo. El prolapso de la glándula lagrimal en el perro es una patología oftalmológica que afecta a este tercer párpado y consiste en la salida de la glándula lagrimal de su alojamiento habitual.

Prolapso de la glándula lagrimal en perros: ¿qué es?

El prolapso de la glándula lagrimal en perros se refiere a un desplazamiento de esta glándula fuera de su ubicación fisiológica en la base del tercer párpado. La glándula estará expuesta al aire, al polvo y al entorno exterior. Esto causará irritación en el ojo afectado.

Si quieres seguir leyendo este post sobre "Prolapso de la glándula lagrimal en perros" dale click al botón "Leer más" y podrás leer el resto del contenido gratis. habitat3.cl es un sitio especializado en Mascotas. Si quieres completar de Leer el post no dudes de ssguir navegando por la web y suscribirte a las notificaciones del Blog.

Seguir leyendo

Esta afección puede ser unilateral o bilateral, y suele darse en perros jóvenes (menores de 1 año).

El prolapso de la glándula lagrimal puede desarrollarse como resultado de una inflamación o hipertrofia de esta zona. También se sospecha de factores genéticos.

Esta enfermedad afecta a todas las razas de perros, pero algunas razas parecen tener una predisposición particular: Cocker Spaniel Americano, Lhasa Apso, Bulldog Francés, Bulldog Inglés, Shih Tzu, Cocker Spaniel Americano, Cocker Spaniel Inglés, Pequinés, Basset Hound, Gran Danés y Spaniel Francés.

Prolapso de la glándula lagrimal en perros: signos clínicos

El prolapso de la glándula lagrimal causa irritación en el ojo, pero a menudo es una condición sin signos de dolor. Los síntomas incluyen:

  • La aparición de una pequeña masa roja/rosada en la esquina interna del ojo;
  • Lagrimeo;
  • Inflamación local de la conjuntiva, donde la conjuntiva estará roja e hinchada;
  • Una secreción viscosa o purulenta

Prolapso de la glándula lagrimal en perros: tratamiento

Es posible que esta afección remita espontáneamente. Sin embargo, suele requerir un tratamiento médico o incluso una intervención quirúrgica para que sea eficaz a largo plazo.

  • Tratamiento médico: consiste en la administración local de colirios o pomadas antiinflamatorias para aliviar la afección y permitir que la glándula vuelva a su posición normal por sí sola.
  • Tratamiento quirúrgico: consiste en extirpar o reposicionar la glándula anclándola en un bolsillo conjuntival mediante una pequeña sutura quirúrgica absorbible. La extirpación de la glándula lagrimal sólo debe hacerse en casos de extrema necesidad y requiere un tratamiento de por vida con lágrimas artificiales para sustituir la función de la glándula. Esta técnica es rápida y eficaz, pero un poco complicada.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio